Como dice Larry Lessig, profesor de Stanford y célebre abogado y estudioso de todos los aspectos del copyright, en este vídeo de TED, lo único que estamos consiguiendo con tantas prohibiciones y leyes imposibles de cumplir es que todos seamos un poco piratas y que las nuevas generaciones vivan permanentemente delinquiendo.
Muy interesante el paralelismo con Sousa o con las leyes que gobernaban el espacio aéreo, considerado como propiedad del dueño de la extensión de tierra que había debajo - hasta que llega la aviación y el sentido común barre de un plumazo unas leyes que llevaban vigentes cientos de años.
Si nosotros mirábamos televisión, nuestros hijos la hacen. Y las creaciones o las obras de creadores que se recrean para transmitir un mensaje diferente no representan un ataque al derecho de esas obras ni persiguen, generalmente, un enriquecimiento personal. Son simplemente las herramientas con las que expresar la creatividad en este siglo XXI.
(Impagable la versión de "I will survive" del video). Os lo recomiendo:
Larry Lessig on laws that choke creativity | Video on TED.com
P.D. ¿Se salvan las saetas de la SGAE?
4 comentarios:
Patsy: me he leido el artículo de El País. A mi también me cae bien Punset, pero no estoy muy de acuerdo con él en esto. Después he ido a ver el vídeo de Larry Lessig y, sinceramente, me parece la típica reflexión de teórico funcionario de universidad americana que tiene el sueldo asegurado. Muy ingenioso, pero así cualquiera. Que se ponga de autónomo en España. A ver qué. Si tuviera que vender un producto cultural o creativo aquí y pagar la luz y la comida dce sus niños con él, ¿pensaría o diría lo mismo? Creo que no. El tema de la gestión y pago de los contenidos apenas ha empezado. ¿Por qué nadie tiene ningún problema en pagar por un coche lo que sea y sin embargo a todo el mundo le parece mal pagar por un producto o contenido cultural y cree que es "libre" una vez que ha salido al aire? La Sgae se pasa a menudo, como todos sabemos; pero seamos serios: mucho más se pasan quienes creen que la producción de los autores es gratis una vez que la tienes o la has oido o conocido. El problema de muchos productos culturales es que basta con verlos una vez para que sean tuyos para siempre. Los copias y punto. Oyes una canción, por ejemplo, la aprendes, la tarareas y ya está. Ok. La tienes. Vale. No puedes hacer eso con un coche. Pero entonces págame por ella como pagas por el Audi, que lo coges todos los días para salir de casa e ir al curro. ¿O no? Y si no es así, entonces tal vez tengan razón los del ladrillo... Y quizás los que inventamos tengamos que dejar de inventar. ¡Total pa qué! Pero no podemos... eso es lo malo. Se aprovechan de nosotros. Los malos siguen siendo malos, aun bajo otro disfraz.
Un abrazo,
Perdón por el comentario tan largo. Es un tema muy interesante que requiere mucha discusión.
He vuelto a releer tu post y mi comentario y hay otro tema que se me pasó. Perdón. Una amiga, a la que tal vez conozcas porque es de nuestra generación, Patsy, Antonella Broglia me dijo una vez con respecto a esto de los contenidos en internet, etc. lo siguiente: Dado que todo el mundo se baja contenidos de internet gratis, habrá que cambiar la leyes, porque... diez millones de hijos nuestros "no pueden ser delincuentes". Una observación muy aguda que también hay que tener en cuenta.
Vale. Perdón que me estoy pasando con tanto comentario.
Un abrazo otra vez,
Víctor, estoy de acuerdo con todas tus puntualizaciones. Pero también creo que las nuevas realidades exigen nuevas soluciones. No sé cuales son. Pero tengo la impresión de que no pueden ser las mismas que se han venido aplicando hasta ahora. Está claro que aún hay muchísimo que hablar sobre el tema.
No me hables de ser autónomo en España, que me enciendo!!!
Por cierto, te dedico el próximo post. Es un poema de Chesterton que me trae recuerdos de la semana santa de mi infancia.
Un abrzo.
Bueno, Punset es uno de esos personajes mágicos que se dan con muy poca frecuencia. Un hombre con un deseo de comunicar, de ser comprendido, que se hace hasta entrañable. Fue también político: en una ocasión nos hizo esperar a los periodistas tres horas: se había pillado un dedo con la puerta de coche: el despiste de los que llevan en su cabeza 'otra realidad'. La puerta del coche le acercó a ésta.
Saludos.
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